Si nos ponemos a navegar por internet la listas o rankings de las “mejores compañías para trabajar” nos encontraremos con una gran diversidad de empresas en cuanto a industria, tamaño, políticas, cultura, etc., sin embargo, todas con un claro denominador: su marca. Es evidente que el nombre, la reputación, es decir, la marca, cuenta y cuenta mucho.

 

Toda empresa invierte esfuerzo en el objetivo de volver atractiva la marca de sus productos en el mercado y alcanzar la fidelidad y preferencia de sus clientes potenciales. Entonces ¿Por qué no aplicar la misma estrategia para atraer a nuestros colaboradores? El Employer Branding es la imagen y reputación que tiene una empresa como empleadora ante sus empleados y sus posibles candidatos; en pocas palabras: retener y atraer a los mejores talentos.

Hoy en día, los candidatos tienen al alcance de su mano toda la información que necesitan sobre las empresas.

Un programa de Employer Branding, no trata de proyectar y promover una “imagen ideal” lejana a la auténtica realidad de la compañía, sino que va mas allá, activando los mecanismos necesarios para que esa imagen ideal corresponda con lo que el empleado vive en su realidad laboral. No hay mayor causa de desmotivación que encontrarnos con que las expectativas puestas en la oferta de trabajo de una compañía no se asemejen a la realidad ofrecida por la misma.

 

Contar en la organización con una marca de fondo, que sea fiel reflejo de nuestra misión, valores y “propósito”, que llegue a los empleados y transmita hacia ellos un sentimiento y orgullo de pertenencia, una ligadura hacia todo aquello que supone y significa la marca es quizás la forma mas eficaz y segura de retener.

 

Comunicación

La comunicación es mucho mas que una mera herramienta que funciona o no de manera eficaz: actúa como canal de distribución del modelo de comportamiento, de negocio, de evolución y de transformación a lo largo de la organización. Por ello, amplifica o reduce el impacto de una estrategia, una iniciativa o una herramienta.


Por eso, no hemos de tener miedo a “comunicar”. Comunicar no significa compartir cada detalle, significa proveer el contexto de las decisiones que tomamos y con eso lograr la alienación de nuestro equipo.


Para que una organización tenga éxito, resulta esencial compartir la información y mantener comunicación constante con los empleados.

 

¿Qué beneficios aporta el Employer Branding a tu empresa?

Según la guía de imagen como empleador realizada por LinkedIn, los tres beneficios más importantes de invertir en construir una estrategia de Employer Branding son:

  • Reducción de costes: Los costes de los procesos de selección de personal se reducen hasta un 50 %. Es más fácil atraer a los candidatos con talento, porque son ellos quienes acuden a la organización.
  • La rotación de personal: El índice de rotación de la empresa se reduce hasta un 28 %, lo que evita el coste que supone perder talento, abrir un proceso de selección y formar al nuevo trabajador.
  • Atraer al mejor talento: Al mejorar la reputación de la empresa, puedes entablar una conversación con el candidato antes de que lo hagan los competidores. La primera empresa a la que acude un candidato es aquella en la que desea trabajar y estará más interesado en escucharla.

 

Por: Luisa Trujillo – Atracción de Talento